El conejo al ajillo es una de las recetas tradicionales de nuestro país. En casa recuerdo que se cocinaba bastante, como guiso típico en olla y con arroz, una de las recetas preferidas de mi padre, muy típica en los peroles cordobeses. El conejo además de estar riquísimo es una carne blanca la cual es perfecta para dietas por su bajo contenido en grasa. Este es uno de los platos que por su sencillez y resultado final gusta a todos los que os encanta la cocina.
Receta de conejo guisado al ajillo
El conejo que ya se criaba y se consumía en la época romana, fue introducido en Francia y criado por los conejares y bosques de las abadías. Este mamífero muy pronto invadió toda Francia en su forma silvestre, causando a su paso destrozos considerables en los cultivos, hasta el punto que pasó a considerarse especia nociva. El desarrollo de las razas modernas ha permitido producir conejos más específicamente por la calidad de su carne, por su piel o por su pelaje.
Las formas de cocinar el conejo son incontables: asado, con mostaza, en cocotte con setas, guisado al ajillo… Su carne poco grasa y por lo tanto algo insípida, soporta perfectamente los aromatizantes, aunque no debemos pasaros: tomillo, romero, laurel etc. La carne es un alimento sumamente rico en proteínas, indispensable dentro de una dieta equilibrada, por esto debemos consumirla muy a menudo. Las carnes blancas tienen múltiples beneficios y por ello la de conejo que es la que hoy estamos cocinando la incluímos dentro de ellos:
- Es una carne magra, lo cual hace que su contenido en grasa sea mínimo.
- Muy recomendable en dietas para controlar el colesterol.
- Rica en vitamina B12, proteínas y potasio.
- Muy fácil de digerir, recomendada en personas con problemas estomacales.
Otro de los protagonistas de nuestro guiso es el ajo, planta bulbo originaria de Asia Central, conocida por sus virtudes medicinales. Hipócrates lo clasificaba entre los medicamentos sudoríficos, y aseguraba que el ajo era «caliente, laxante y diurético». Uno de los usos más comunes del ajo en la cocina es como saborizante natural, su aroma y sabor es muy particular, dando a los platos un gusto especifico muy utilizado en la cocina mediterránea. Es un ingrediente en el que muchos platos no serían igual sin la presencia de esta como el pollo al ajillo, el salmorejo cordobés, el gazpacho andaluz, el alioli, la sopa de ajo…
Nuestro conejo guisado al ajillo de hoy, es una receta algo diferente, porque combina también un ingrediente que le da frescor y un sabor algo diferente y es el limón. Este no es un conejo al ajillo típico, es una pequeña variante que me encanta, tengo que decir que la receta está sacada del Larousse Gastronomique, así que ya podéis imaginar que no falla. Además estreno mi preciosa cocotte de Le Creuset, por favor me tiene enamorada, esta pertenece a la nueva colección que han sacado, con algunas mejoras y con una gama de colores preciosísima.
Ingredientes del conejo al ajillo
- Un conejo troceado
- 20 dientes de ajo sin pelar
- 2 limones
- La piel de uno de ellos
- Aceite de oliva virgen extra
- 150ml de vino seco
- 1 hoja de laurel
- Tomillo fresco
- Sal
- Pimienta
Elaboración de la receta
- Exprimimos el zumo de los dos limones y reservamos la ralladura de la piel de uno de ellos.
- Calentamos el horno a 180º.
- Ponemos dos cucharadas de aceite de oliva en nuestra cocotte y calentamos a fuego medio.
- Doramos lentamente el conejo durante unos 10 minutos aproximadamente, moviéndolos de vez en cuando.
- Sacamos de la cocotte los trozos de carne y ponemos los ajos.
- Sofreímos los ajos durante 3-4 minutos a fuego medio, para que no se pongan duros.
- Incorporamos el conejo y agregamos el vino, el zumo de los limones, la ralladura del limón, la hoja de laurel, una ramita de tomillo y salpimentamos.
- Dejamos que comience la ebullición a fuego suave, tapamos y metemos en el horno.
- Horneamos durante una hora, en mitad de esta tiempo moveremos para que todos los trozos se hagan por igual.
- Comprobamos que la carne de conejo esté tierna y sacamos.
- Servimos inmediatamente.
Consejos para tener éxito con la receta:
- Tengo que decir que el sabor del limón es intenso, si no te gusta demasiado fuerte puedes añadir sólo el zumo de un limón en vez de dos. A nosotros nos gusta fuertecito pero ya sabes que eso tiene arreglo.
- Importante que cuando sofrías el conejo sea de manera lenta y progresiva así la carne se sellará mejor y quedará más tierna.
- Los ajos aunque no los peles deberás quitarle esa pelusilla blanca que tiene por fuera y dejarle sólo la piel.
- Un conejo troceado
- 20 dientes de ajo sin pelar
- 2 limones
- La piel de uno de ellos
- Aceite de oliva virgen extra
- 150ml de vino seco
- 1 hoja de laurel
- Tomillo fresco
- Sal
- Pimienta
- Exprimimos el zumo de los dos limones y reservamos la ralladura de la piel de uno de ellos.
- Calentamos el horno a 180º.
- Ponemos dos cucharadas de aceite de oliva en nuestra cocotte y calentamos a fuego medio.
- Doramos lentamente el conejo durante unos 10 minutos aproximadamente, moviéndolos de vez en cuando.
- Sacamos de la cocotte los trozos de carne y ponemos los ajos.
- Sofreímos los ajos durante 3-4 minutos a fuego medio, para que no se pongan duros.
- Incorporamos el conejo y agregamos el vino, el zumo de los limones, la ralladura del limón, la hoja de laurel, una ramita de tomillo y salpimentamos.
- Dejamos que comience la ebullición a fuego suave, tapamos y metemos en el horno.
- Horneamos durante una hora, en mitad de esta tiempo moveremos para que todos los trozos se hagan por igual.
- Comprobamos que la carne de conejo esté tierna y sacamos.
- Servimos inmediatamente.
Espero que os guste y disfrutéis en la cocina…
Patricia dice
Sin duda una receta típica y riquísima, además es que tiene una pinta fabulosa!
Ana dice
Esta semana voy a hacer esta receta, como muy bien has recomendado sólo con un limón. Seguro que está buenísima.
Conchy gastroandalusi dice
Cariño, eres ESPECTACULAR. Cada día lo flipo más con tu trabajo
Patry de Sabores y Momentos dice
Pues yo me apunto a un plato de este conejo en tu casa contigo para echarnos unas risas….que ya hace mucho que no nos vemos!!!! Me ha encantado la receta, en casa lo guisan diferente así que me llevo tu receta para probarla!
Un besazo mi niña!